Hoy he hallado un poema dedicado a las manos del masajista, esas manos que dan masaje, a las manos que dan vida y amor, manos que intuyen nuestra necesidad de contacto, manos que ayudan a sanar… Las Manos, como dijo Miguel Hernández son «la herramienta del alma».

las manos del masajistaHay manos que sienten, hay manos que
avanzan seguras y firmes, calmando el dolor
ajustando un hueso, relajando un músculo,
dejando flexible la articulación.
Hay manos que vibran, serenas y fuertes
con un magnetismo de suave temblor
sanando un tejido, despertando un nervio
vendando un esguince, frotando un tendón…
con la maestría del que tiene un don;
hacer llevaderos -por rudos que sean-
espasmo y angustia, insomnio y tensión.
Manos que adivinan en donde nos duele
y saben tocarnos con gracia y unción;
aquí se detienen, allá se prodigan,
con ritmo sedante cual una oración.

Desprenden efluvios de luz bienhechoramanos de masajista madrid
y dejan sus huellas mensajes de amor…
y acuñan e irradian el arte de Hipócrates,
la luz de Avicena, la magia del sol
!Si alguno descubre las manos que digo,
¡Bendígalas siempre con honda ilusión!
porque transfiguran nuestra carne herida,
¡y curan, a veces, hasta el corazón!

 

Rogelio Garrido Montañana*
(extraído de su obra poetica “Los Poemas del Masaje”)

*Terapeuta Manual, Naturópata y diplomado en Botánica Medicinal,  escritor, periodista y poeta. Nació en Benaguacil (Valencia) en 1932.

 

Abrir chat
Cuida del hogar de tu Vida... tu cuerpo.